Captura de enjambres mediante trampas con botellas plásticas descartables
Materiales y preparación de la trampa
Para la captura de enjambres de abejas, se recomienda el uso de botellas plásticas descartables de 2 litros. Estas deben ser revestidas con dos hojas de papel, como papel kraft, papel bond grueso o cartulina delgada, y posteriormente cubiertas con una capa de plástico negro para impermeabilizarlas y protegerlas de la lluvia.
En la tapa de la botella se perfora un orificio de aproximadamente 1 cm de diámetro, a través del cual se vierte una mezcla atrayente previamente preparada.
Preparación de la mezcla atrayente
Para la elaboración de la mezcla se requiere propóleo y cerumen, los cuales pueden obtenerse de un criador de abejas nativas o de fuentes especializadas, como meliponicultores en Nicaragua. Estos ingredientes se disuelven en alcohol medicinal al 90 % o, en su defecto, en licor de caña blanca. La mezcla debe reposar durante varios días, agitándola durante aproximadamente 10 minutos por día hasta lograr una solución homogénea.
Una vez lista la mezcla, se vierte en el interior de la botella, asegurando que el líquido cubra toda la superficie interna. El excedente puede ser recuperado y almacenado en la botella con la tintura restante para futuras aplicaciones.
Evaluación de la eficacia de la trampa
Se realizaron pruebas con botellas suspendidas en diferentes posiciones:
Verticales con el orificio hacia abajo.
Inclinadas a 45 grados.
Horizontales.
Los resultados indicaron que todas las configuraciones permitieron la captura de enjambres, sin embargo, la mayor tasa de captura se obtuvo con las trampas en posición vertical con el orificio hacia abajo. Adicionalmente, se observó que la eficiencia mejoraba cuando las trampas eran ubicadas en lugares oscuros y con menor exposición solar.
Conclusión
La técnica descrita es una estrategia eficaz para la captura y manejo de enjambres de abejas en sistemas de meliponicultura y apicultura, optimizando la recolección de colonias y facilitando su establecimiento en colmenas artificiales.
Manejo del meliponario durante la temporada de invierno
- Renovación de estructuras: Sustituir cajas deterioradas por colmenas en óptimas condiciones antes del inicio de la temporada lluviosa, asegurando una mejor protección térmica y estructural.
- Control de Foridae: En caso de infestación, instalar trampas internas y externas con vinagre para reducir la población de moscas foridas (Pseudohypocera kerteszi), vectores de enfermedades y depredadores de las crías.
- Evitar la división de colonias: La escasez de néctar y polen dificulta el desarrollo de nuevas colonias, aumentando la tasa de mortalidad en divisiones realizadas durante esta época.
- Suplementación alimenticia: Implementar alimentación artificial con jarabes a base de miel diluida o soluciones nutritivas si se detecta escasez de reservas en las colmenas.
- Protección del meliponario: Ubicar las colmenas en áreas resguardadas de lluvias y vientos fuertes, evitando el enfriamiento y el estrés de las colonias.
- Control de humedad: Prevenir la acumulación de humedad en el entorno del meliponario y en las superficies externas de las colmenas para reducir el riesgo de proliferación de hongos y enfermedades.
- Evitar traslados de nidos silvestres: La conversión de troncos a cajas artificiales durante el invierno tiene una alta tasa de fracaso debido a la fragilidad de las colonias en esta estación.
- Monitoreo de depredadores: Realizar inspecciones periódicas alrededor del meliponario para controlar la presencia de hormigas, arañas, lagartijas (Tropidurus spp.) y otros posibles depredadores.
- Suspensión de cosecha: No recolectar miel durante la temporada invernal, ya que la extracción de reservas puede comprometer la supervivencia de la colonia.
- Manejo cauteloso de las colmenas: Evitar la apertura innecesaria de las colmenas, reduciendo el estrés y el riesgo de enfriamiento del nido.
Implementar estas prácticas contribuirá a la estabilidad del meliponario y al fortalecimiento de las colonias frente a las condiciones climáticas adversas del invierno.